El gran legado de Andreu Barrabino

Dicen que nadie muere definitivamente mientras su recuerdo permanece en la memoria de alguien. Pero me gustaría matizar: nadie muere definitivamente mientras su recuerdo permanece en la memoria y en los corazones de los que le conocieron. Es por ello que, indudablemente, Andreu Barrabino sigue entre nosotros, tras embarcarnos en la 2ª edición de los premios, que él mismo fundó, sin su presencia. Pero está: entre las paredes de la Universidad Abat Oliba CEU, en cada edición de los GoliADs, en los corazones de los profesores que compartieron vivencias y, por ende, en el recuerdo de los estudiantes. 

Andreu Barrabino, profesional de la Comunicación. Fuente: UAO CEU

El impulsor del Colegio de Publicistas y Relaciones Públicas de Cataluña –el primero que se creó en España en este ámbito– fue también el mayor precursor del Primer Festival de Publicidad y Comunicación donde el jurado está compuesto por estudiantes de la UAO CEU llamado GoliADs. Y fue tal su entrega, entusiasmo y pasión por el certamen, que Albert Maruny –gran amigo del profesional y director de orquesta de esta y de todas las ediciones anteriores junto a Xavi Casado– quiso fundar una categoría en 2020 en su honor: el “Premio Andreu Barrabino Apoyo a la Docencia”, en el que se reconoce a aquellas personas o instituciones que hayan tenido un impacto en el sistema educativo y cuyo esfuerzo en mejorar este ámbito deba ser reconocido. Tal y como hizo Barrabino. Tal y como hacen los que siguen sus pasos. 

Gran investigador y biógrafo de la vida y obra del comunicólogo Joan Costa –reconocida figura de la comunicación organizacional y corporativa a nivel internacional– se convirtió en una de las personalidades más reconocidas sobre la comunicación estratégica. Podríamos seguir mencionando todos los logros que consiguió, como el “Drac de Plata” concedido por la Asociación Empresarial de la Publicidad, o el GoliAD a la “Mejor Trayectoria Profesional”, o la docencia que impartió en su especialidad en universidades de Colombia, Alemania y Ecuador. 

Recordamos las palabras que el mismo Maruny le dedicó en el obituario de la Vanguardia con motivo de su fallecimiento: “Quienes han trabajado y/o colaborado profesionalmente con él, coinciden en destacar por encima de todo su humildad, bondad, honestidad y nobleza. Mantenía largas conversaciones y siempre regalaba sonrisas.” Continuó afirmando que fue “un amigo en mayúsculas, siempre cariñoso y dispuesto a escuchar y a ayudar. Apasionado perico, viajero aventurero y muy enamorado de su familia”. 

Si preguntan por Andreu, la respuesta será, sin duda alguna, un sinfín de cualidades –como su pasión por los mensajes que transmitía–, fortalezas y sabias enseñanzas que ofrecía con la máxima generosidad posible.

Nos gustaría terminar este post con 2 de sus múltiples sabios consejos que la mayoría de los afortunados que lo tuvieron como profesor seguro recuerdan: 

“Si no dices quién eres, otros lo harán por ti” 

“En comunicación, menos es más”.

Apliquemos en nuestras vidas sus tan inteligentes palabras con todo nuestro corazón. 

Gracias, Andreu, por tu legado. Los ADvids prometemos hacer la mejor XVI melódica edición de los GoliADs posible. 

Autora: Andrea de Sentmenat