Crónica GoliADs 2014 – Edición VIII
En los octavos GoliADs, el Aula Magna volvió a demostrar su multifuncionalidad al convertirse en una estación de metro. La temática de esta edición evocaba un simbólico viaje por la vida. Con esta apuesta se perseguía mostrar las diversas paradas de un recorrido vital, unas “estaciones” que van configurando la personalidad de las personas que con sus actuaciones pueden decidir su trayectoria hacia el éxito profesional. Los estudiantes hacían un guiño a su próxima parada en el mundo laboral para, a base de sutilidad, ver si alguno de los peces gordos presentes en la sala picaba y les ofrecía un puesto de trabajo.
Los GoliADs de 2014 serán recordados por muchas cosas, pero posiblemente el hecho más destacado fue la presencia de J. A. Bayona. No se trata de menospreciar a nadie, ya que en las distintas ediciones de los GoliADs han acudido personajes muy relevantes del mundo de la Comunicación, Publicidad, destacados representantes institucionales, así como cantantes, actores o actrices en la cresta de la ola. Pero no cabe duda que contar en vivo y en directo con un director de cine que ha intervenido en películas como El orfanato o Lo imposible, aporta un pedigree a los GoliADs que ya les gustaría a otros festivales. Bayona acudió a la Gala para recoger el premio al mejor spot de Producto al haber producido un corto para la marca KH7.
Pero más allá del reputado director cinematográfico, también obtuvieron premios Ana Pastor, Dani Mateo o Joan Campmany, al que se reconoció su trayectoria profesional en esta edición. Un año más también estuvo presente Manuel Fuentes, después de recibir un premio el año anterior, los alumnos consideraron que podían volver a tirar de él para entregar un galardón. También hubo un momento de gloria para Miquel Calzada, más conocido como Mikimoto, que por si alguno no lo sabe completó sus estudios en la UAO y desde entonces mantiene una relación de amistad y respeto incondicional hacia Mossen Brufau. Especialmente relevantes fueron las palabras de Claudi Alsina, hasta hace poco Secretari General del Consell Interuniversitari de la Generalitat de Catalunya, quien llegó a afirmar que los GoliADs eran la mayor muestra de creatividad que se celebraba en el sistema universitario catalán. Una florecita muy preciada en boca de un habitual de cada edición. Así que, entre una cosa y otra, la Gala tuvo un buen brillo.
La previa de aquella edición fue bastante relajada, el grupo no era muy numeroso, un aspecto que no deja de facilitar un poco las cosas. Destacaríamos el buen feeling que existió entre las dos presentadoras de la Gala. Los GoliADs tienen algo que los hace diferentes y a lo largo de todas sus ediciones hemos visto rupturas de amistades que parecían infranqueables o el nacimiento de afectos entre personajes que parecían antagónicos, a veces de manera muy sincera y otras con un par de copas en el cuerpo. El caso de las presentadoras de 2014 apunta en esta última dirección. Creemos que durante sus años de carrera no se habían cruzado palabra, prácticamente ni mirado a la cara e incluso, tenemos la sospecha de que cuando se hizo público el resultado del casting por la cabeza de alguna de ellas llegó a pasar algo como “¿yo con esta pedorra tengo que presentar…?” Pero como el roce hace el cariño… Nunca sabremos si en los GoliADs nació una amistad para toda la vida, pero lo que sí podemos constatar es que hubo “buen rollo”, el cual quedó claramente demostrado con su complicidad en el escenario. La 8ª edición también fue la de poner velitas para pedir que durante los meses de trabajo no surgiera ninguna crisis ni atisbo de ruptura entre una de las presentadoras y su novio, ya que este último se ofreció a colaborar desinteresadamente en el escenario. No sabemos cómo llevaron esos meses, pero lo que quedó claro es que el chico cumplió con su palabra y puso todo su empeño y dedicación para que el escenario fuera uno de los más lustrados de todos los GoliADs.
Xavier Casado Cortes
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